A DIESTRA ... Dicen que en política no hay sorpresas, solo sorprendidos… y vaya que Javier Corral se llevó un sustito de aquellos cuando se topó a su compadre, el empresario Eduardo Almeida, en el aeropuerto de Chihuahua. Apenas salía el exgober del avión y ¡tómala!, que le sueltan un “¡Quiubo culón!” a todo pulmón. Como si fuera escena de novela, dos de la Guardia Nacional brincaron como resortes para escoltar al senador, que según los testigos se puso más blanco que una hoja de Excel sin fórmulas, y aflojó las piernitas para que lo subieran a la camioneta. Y mientras eso pasaba, por ahí andaba un reportero misterioso grabando el chisme en vivo. Cuentan que el pleito viene de tiempo atrás, que si terrenos regalados, que si lana para campañas, que si intentos de encierro… puro amor de compadres. Ahora sí que la política chihuahuense anda más entretenida que serie de narcos con presupuesto.

Y SINIESTRA...  ¡Ay nanita! Pues aunque Claudia les echó la mano quitando la reforma al ISSSTE, los profes de la CNTE dijeron “gracias, pero no gracias” y se le plantaron en el Zócalo como quien llega a una fiesta sin invitación... pero con bocina y toldo. Y es que aunque la presidenta ya hasta les ofreció condonar deudas y congelar la edad de jubilación, los maestros no se bajan del barco y siguen exigiendo que les borren la reforma del 2007 y que les quiten las Afores, porque eso de jubilarse viendo cómo su lana se va por comisión, no les hace gracia. Así que, aunque ya hubo reunión, promesa y abrazo, el magisterio no se va... al menos no todavía. Se vale pedir, dicen ellos, pero también se vale no dejarse.

A DIESTRA I... Desde ayer andan los adultos mayores bien surtiditos, y no por el cheque del retiro, sino porque ya arrancó el Programa Alimentario del Adulto Mayor con toda la pompa y ceremonia que le gusta al alcalde Marco Bonilla, quien se aventó la entrega simbólica como todo un influencer del bienestar, digo... de la ayuda alimentaria. Más de 7 mil abuelitos recibirán su dotación mensual durante 10 meses, con paquetes armados por nutriólogos y no por improvisados, cosa que se agradece, porque mínimo vienen balanceados y no puro atún con galletas saladas. La presidenta del DIF, Karina Olivas, dijo que esto es un acto de amor y gratitud, y claro, también un acto de logística y buena planeación, porque entre chequeos de salud y entrega de cajas, los adultos mayores están siendo tratados como se debe. Así que si los ven más contentos por la calle, no es por el clima... es porque en su despensa ya no falta el frijol ni la avena.

AL CENTRO... Pues mientras Claudia Sheinbaum anuncia con bombo y platillo que ahora sí va en serio el fortalecimiento a la Comisión Nacional de Búsqueda y hasta promete más presupuesto, una base de datos única y castigo a los funcionarios que se hagan pato con las desapariciones… ¡zas! Que Morena en el Senado revienta la sesión justo cuando se iba a discutir el caso del rancho Izaguirre en Teuchitlán. Dicen que no hubo quórum, pero la neta es que a más de uno le dio frío cuando el PAN pidió que la OEA y la CIDH se metieran a revisar el cochinero. O sea, de dientes pa’ fuera todo es compromiso, pero cuando se trata de hablar claro sobre el horror en Jalisco, aplican la de “mejor ni tocamos ese tema”. Así que mientras Sheinbaum quiere mostrar músculo, sus senadores le arrugan la frente.

 

Y SINIESTRA I...  Pues el Congreso del Estado se convirtió en pasarela de derechos humanos este jueves y viernes, con las comparecencias de quienes quieren agarrar la batuta en la CEDH, y como era de esperarse, el chismecito se puso sabroso con temas bien pesados: desde el acoso en las universidades, hasta el aborto y los líos de facultades que más de uno trató de esquivar como si fueran preguntas en examen sorpresa. Ahí estaban todos los meros meros de la Jucopo sacando filo a sus preguntas: Alfredo Chávez con su ojo clínico, Cuauhtémoc Estrada con su libreta de pendientes, Octavio Borunda apuntando todo para luego, y hasta Irlanda Márquez con cara de “yo sí estudié”. Entre los que se aventaron el ruedo están las exdiputadas Liz Aguilera y Georgina Bujanda, que no se dejaron, y el actual encargado Alejandro Carrasco, que aguantó vara como pudo. Dicen que la terna todavía no está cantada, pero por lo pronto ya vimos que la cosa no está para tibiezas, y que quien quiera dirigir la CEDH más le vale tener cuero duro, lengua afilada y, claro, el respaldo correcto.