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Inauguración de la Refinería de Dos Bocas enfrenta críticas y protestas en Tabasco



Tabasco.- El presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró la refinería Olmeca de Dos Bocas este sábado, marcando un hito en su administración al cumplir una de sus promesas clave para reducir la dependencia de México en las importaciones de gasolina. El evento, realizado en su estado natal de Tabasco, contó con la presencia de la presidenta electa Claudia Sheinbaum y el director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero, entre otros dignatarios.


La refinería Olmeca ha sido objeto de numerosos retrasos y sobrecostos, pasando de un presupuesto inicial de 8.000 millones a un desembolso final de 16.000 millones, según datos de Pemex enviados en mayo a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos. A pesar de los desafíos, el presidente López Obrador estima que la refinería alcanzará una producción de 260.000 barriles diarios de gasolina. Sin embargo, la planta aún enfrenta desafíos operativos, con pruebas de funcionamiento que pueden extenderse entre un año y año y medio.


La inauguración se vio empañada por una manifestación de protesta que recibió a los políticos en el evento. Los manifestantes, entre los que se encuentran pescadores locales, expresaron su preocupación por la contaminación del agua y del aire causada por el complejo petrolero. Aseguran que el río Seco ha sufrido la muerte de especies y han denunciado la mala calidad del agua y del aire, lo que también está afectando al turismo en la región. Los manifestantes han solicitado una reunión con el Gobierno para abordar sus preocupaciones.


Durante el acto inaugural, López Obrador expresó su satisfacción por estar en su tierra natal y se congratuló de los logros de su mandato. Describió la inauguración como una “misión cumplida” y se dirigió a sus críticos, diciendo que, aunque han calumniado y mostrado inconformidad, “no han pasado de eso”, lo que, según él, ha permitido que la Cuarta Transformación de México siga adelante en un ambiente pacífico.


La refinería Olmeca, diseñada para procesar hasta 340.000 barriles de crudo diario, ha comenzado a recibir diésel contaminado para su depuración. Según el director de Pemex, la planta operará a la mitad de su capacidad, procesando 177.000 barriles diarios para finales de año. Este avance se alinea con el objetivo del gobierno de reducir significativamente la importación de combustibles; al inicio del sexenio, México importaba 927.000 barriles diarios, y se espera que esta cifra disminuya a 52.000 al final del mandato, con una meta final de 20.000 barriles para 2025.


La dirección de Pemex, junto con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sigue siendo una de las áreas de mayor incertidumbre en el futuro gabinete de Sheinbaum, cuya confirmación se espera en las próximas semanas. A pesar de las inversiones millonarias en Pemex durante este sexenio, la autosuficiencia en la producción de combustibles no se alcanzará hasta 2025. En 2023, las seis refinerías de Pemex y la planta de Deer Park en Texas produjeron aproximadamente 655.000 barriles diarios de gasolina.

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