Trump, de nuevo en la carrera presidencial por EU
EEUU.- En las primarias de Nuevo Hampshire, celebradas el martes, Donald Trump, expresidente de Estados Unidos (2017-2021), logró una victoria destacada sobre su única rival para consolidar su control sobre el Partido Republicano: Nikki Haley, quien se presenta como una alternativa moderada desde la derecha.
Aunque aún se espera la divulgación de los resultados definitivos, lo proyectado por los medios sugiere que el exmandatario tiene una ventaja de dos dígitos sobre la exembajadora de EE.UU. ante la ONU. Con el 91% de los votos escrutados, los porcentajes respectivos son del 54.6% para Trump y del 43.1% para Haley, según informes de medios como The New York Times.
A pesar de que las primarias de Nuevo Hampshire asignan solo 22 delegados de los 2,429 que participarán en la Convención Nacional Republicana en julio, donde se elegirá al candidato presidencial, esta contienda representa una prueba crucial para el poder de convocatoria de Haley, quien sigue siendo una contendiente activa.
La exdiplomática, que trabajó en el Gobierno de Trump hasta 2018, aspiraba a obtener un resultado sólido en el estado, donde los votantes independientes y moderados constituyen más de la mitad del electorado. Aunque superó las expectativas en cuanto a votos obtenidos, su propuesta no logró ganar el respaldo significativo de los votantes republicanos, obteniendo solo un 25% de apoyo según una encuesta a pie de urna publicada por la CNN.
En un ambiente lleno de energía, rodeado de fervientes seguidores del partido, incluyendo al senador de Carolina del Sur Tim Scott y la legisladora Marjorie Taylor Greene, Trump se mofó de Haley llamándola impostora. En el lobby del hotel Sheraton de Nashua, donde la campaña de Trump alquiló un salón de eventos para celebrar la noche electoral, decenas de seguidores entusiastas escucharon el discurso de victoria del expresidente.
"¡Vamos a recuperar la Casa Blanca!", exclamó Dan, un carpintero de 55 años y residente de esa localidad, quien se acercó al hotel vistiendo una camisa y gorra rojas, ambas decoradas con el eslogan de campaña de Trump "Hagamos a EE.UU. grande otra vez".
